TU MIRADA DUERME VIERNES SANTO

Maria en Soledad

En Viernes Santo María vive la experiencia de acoger en sus brazos a su Hijo muerto, es un dolor profundo, el dolor de una madre que pierde a su Hijo amado.

"En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres, y la luz brilla en las tinieblas y las tinieblas no la vencieron" 1,4

MIRANDO DESDE EL MURO

MIRADA PREVIA

Todo recuerdo implica un cúmulo de imágenes que avasallan la mente, ansiosas de hacerse presente aun por breves momentos.
Su permanencia en la memoria les da caracter de presencia viva, levitante, un terreno incierto, fantasmagórico, a la espera de un tiempo que les regale una nueva mirada.
Retroceder hacia el pasado pareciera incoherente frente a esa mirada previa que anticipa veladamente el futuro.
Historia, presente y futuro se confabulan para construir una similar tipografia de imágenes, una estructura moldeada por determinadas experiencias de vida.
Observar esas imagenes mentales agudizando la mirada, dejar que evoquen, presenten o adviertan, da oportunidad a elaborar otras instancias visuales, otras formas de existencia.

Mirada y Silencio

Desde el Laberinto

Desde el laberinto la mirada busca un punto de fuga que ofrezca opciones de salida. Aun permaneciendo agazapada entre las sombras, ese encuentro fugaz con espejismos de luz, crea expectativas de apertura que trasgredan la inutilidad del encierro.
La serialización de estas imágenes presupone un entramado laberíntico donde la mirada ejercita ya no tan solo la funcion observante e informativa del contexto espacial. Una vez dilatada la pupila alterna precipitademente sombra y luz en un incierto juego de libertad perdida y puertas entreabiertas.